Asociación Nacional de Anunciantes de Colombia
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Bogotá, Colombia

30 Chistes de aniversario

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Hacer una selección de chistes puede resultar muy divertido para uno, y un estruendoso fracaso para los lectores.  Resulta que el humor que uno cree de aceptación general, a veces sólo alcanza la aceptación de alguien en particular y no de los demás.  Así pues, la verdad es que por muy bueno que sea un chiste, para aceptarlo, o disfrutarlo, se requieren varios ingredientes: oportunidad, estado de ánimo, inteligencia, personalidad, tiempo, acceso al chiste, buena dentadura, buena compañía, no deber plata, tener trabajo, y una gran disposición para mamar gallo y divertirse, y en esto no hay excepciones.

Altos y bajitos, ricos y pobres, gordos y flacos, negros y blancos, hombres y mujeres, gringos, franceses, africanos, rusos,  venezolanos y colombianos.  Todos necesitan por lo menos tres de estos ingredientes, especialmente del último. Por Alfonso Lizarazo,  productor de TV y con más de 30 años de experiencia en este tema.

Los chistes  pueden tener ocurrencia en cualquier parte del mundo y en cualquier idioma.  Están basados en el comportamiento y cotidianidad de los seres humanos, separados solamente por las distancias y las diversas culturas.


Grandes escritores y pensadores están de acuerdo en que una de las tareas más hermosas del hombre es hacer reír, y hacer reír y pensar al mismo tiempo es todavía más hermoso, pero más difícil.
La mayoría de las personas que trabajan en esto de contar y hacer chistes, o sea de cómicos, aseguran que lo más importante a la hora de hacer reír a los demás, no es tanto la historia del chiste –aunque yo creo que sí– sino del talento y la gracia que posea la persona que lo cuente. Esto puede ser cierto en algunos casos. Pero hay apuntes tan ingeniosos y oportunos que basta con decirlos, sin necesidad de tener muchas cualidades histriónicas.


El humor y la risa son los rasgos o características que identifican y diferencian a los humanos de los animales.  Por lo menos eso piensan los historiadores. Espero que, cuando lean esta selección,  se rían mucho y noten la diferencia.


1.  MI AMOR
Los esposos hablan:  –Mi amor, ¿no crees que ya es hora
de que hables con nuestro hijo del sexo? Deberían tener una
conversación de hombre a hombre.
–Pero mi vida, si nuestro hijo ya tiene treinta años
y ya debe saber todo respecto del sexo.
–Ya lo sé,
¡pero es para ver si de pronto aprendes algo nuevo de él!




2.  MILLONARIOS
En la cama está la abuelita y entra Luisito a visitarla:
–¡Hola abuelita!
–¡Hola Luisito!
–Abuelita cierra los ojos.
–(Cerrando los ojos)¿Y para qué quieres que cierre los ojos?
–¡Es que mi papá siempre dice que cuando cierres los ojos
seremos millonarios!

3.   UN BARRil
Va un campesino con un enorme barril en una carreta,
se encuentra con el cura:  –Buenas tardes, hijo.
–Buenas, su reverencia.
–¿Para dónde va con ese barril don Matías?
–Pa´ donde el doctor Matasanos.
–¿Y qué lleva en el barril?
–Pos las muestras de orina padrecito.
–¿En un barril?
–Sí, su persona. ¡Es que el doctor me dijo que
se las llevara cada tres meses!

4.  Gerente
Un tipo habla con un empleador:  –Buenas,
¿aquí hay vacantes?
–Así es, veamos cuáles son sus aptitudes.
¿Sabe escribir a máquina?
¿Maneja computador?
–Desde luego tengo años de experiencia.
–¿Qué más sabe hacer?
–No se preocupe en preguntarme,
¡Sé hacer de todo!
–Me parece muy bien, ¿qué puesto
le gustaría desempeñar?
–¡Gerente!
–¡Gerente?, ¿está usted loco?
–¡Disculpe!, no sabía que para ocupar
el puesto de gerente necesitaban un tipo así.

5.  arte
La profesora habla con sus alumnos: –Bueno niños, hoy vamos hablar de arte.  A ver Cesitar, nómbrame un cuadro famoso.
–La Gioconda, de Leonardo da Vinci.
–Muy bien.
–Andresito, una escultura famosa.
–Ay profe, pues el Moisés de Miguel ángel
–Muy bien niños, se ve que estudiaron.  Jaimito nómbrame
un busto famoso.
–¡Pues el de Sofía Vergara señorita!

6.  Yo lo mato
Va una señora con un bebé y un tipo se le acerca: -Doña Evelia, ¿para dónde va con ese lindo bebé?
–Lo llevo al médico, está enfermito.
–No se puede negar que tiene los mismos ojos y la misma nariz que su esposo.
–[De mala gana] ¿Si?
–Por supuesto y esa sonrisa igualita a la de su esposo.
–¿Si?
–Claro, en otras palabras, este bebé es el vivo retrato de su esposo.
–¡Ah, desgraciado, yo lo mato!
¡Un momento señora! ¿Por qué se enoja si le digo que su bebé
es igualito a su marido?
–Es que este niño ¡es hijo de la secretaria de mi esposo!

7.  El arriendo de los castillos
Dos amigos conversan: –Oye José, ¿sabes la diferencia entre un neurótico, un sicótico y un psiquiatra?
–No, no tengo idea.
–Mira, el neurótico construye castillos en el aire; el sicótico vive en  los castillos en el aire que construyó el neurótico.
–¿Y el psiquiatra?
–¡El psiquiatra les cobra el arriendo de los castillos a los dos!

8.   En la cárcel
Dos presos conversan: –Oye car’etusa, ¿tienes familia aquí?
–Claro que sí.
–¿Pero nunca vienen a visitarte?
–No, nunca
–¿Y eso te pone triste?
–No, porque todos están presos aquí.

9.  Cómo encontrar otro empleo
El vendedor atiende a un señor: –A la orden, señor.
–Gracias, quiero un libro que pueda leer en la oficina.
–Mire, este es el que necesita, es muy apropiado para leer en la oficina.  Se llama “Cómo tener un aumento de sueldo”.
–¿Y es bueno?
–¡Claro! Los que lo han comprado han vuelto por el segundo tomo.
–Ah, ¿es que hay un segundo tomo?
–Por supuesto, se llama “Cómo encontrar otro empleo.”

10.  Mi esposo
La hija a la mamá: –Mi esposo es un miserable.
–No digas eso, hija, el tonto lleva diez años entregándote sagradamente el cheque del sueldo, el primero de cada mes.
–Sí, mamá, pero ayer me enteré que le pagan quincenalmente.

11.  El novio
El novio a su suegro:  –Señor, quiero casarme con su hija.
–¿Ya vio a mi mujer?
–Sí, pero prefiero casarme con su hija.

12.  Libertad de trabajo
–¿Qué le ocurre a usted señor?
–¿Quién ha ordenado fijar en las paredes unos carteles con
la leyenda “cuidado con los ladrones”?
–La jefatura de la policía.
–¿Por qué?
–Porque lo escrito en ese cartel atenta contra
mi libertad de trabajo.

13.  Puesss……
Un amigo le dice a otro: –¿Me puedes prestar un millón de pesos?
–Sí, pero cuando regrese de mi viaje.
–¡Gracias!, ¿cuándo te vas?
–Puesss…no lo sé todavía.

14.  ¿Verdad?
Confidencia a la mejor amiga: –Creo que Antonio va en serio
mijita.
–¿Verdad?
–Sí, ya me trae la ropa interior para que se la remiende.

15.  Mi capitán
Un capitán en una instrucción dijo a sus soldados: cuando yo cuente tres, todos ustedes deben simular trabajar en una profesión cualquiera. Los soldados empezaron a simular manejar carro, otros bicicleta, otros a mecanografíar, otros hacían de peluqueros, carpinteros, etc.  Pero un soldado se quedó parado y cruzado de brazos mirando en todas las direcciones sin hacer nada y el capitán le dijo: –¿Ño oyó la orden soldado?
–Sí la oí mi capitán.
–¿Entonces usted de qué está haciendo?
–De oficial del ejército mi capitán.

16.  Mi marido
El dependiente a la señora en el supermercado: –Señora,
¿por qué están húmedos los billetes?
–Es que mi marido lloró cuando me los entregó.

17.  De Bogotá a Cali
En la ruta de Bogotá un señor recoge en su carro a
una linda muchacha que le hace señas para que la lleve:
–Usted es la tercera muchacha embarazada que llevo
este mes a Cali.
–¡Yo no estoy embarazada!
–Bueno, pero todavía no hemos llegado a Cali.

18.  Un tinto
–Regáleme para un tinto.
–No puedo.
-Haz un esfuerzo.
-Hummmmmghh….¡no puedo!

19.  Tutiame
–Oye Marcelo, ¿tú sabes tutear?
–Claro que sí.
–Entonces “tutiame” este barro que tengo aquí.

20.  Por eso mismo
Dos amigas charlando: –Ahora sí voy a cuidarme
para no quedar embarazada.
–Pero me contaste que tu marido se hizo la vasectomía.
–Por eso mismo.

21.  Todo bien, gracias
A uno de los que no hacen favores.
–¿Me presta $100.000?
–Lo siento, pero no tengo dinero aquí.
–¿Y en tu casa?
–En casa todos están bien, gracias.

22.  El tacaño
Un tacaño en la farmacia:  –Deme un cepillo de dientes.
–¿Cómo lo quiere?
–Fuerte, somos nueve en la familia.

23.  El mínimo
Dos amigos charlan: –Fíjate, por más que lo intento, no consigo vivir con cinco millones de pesos al mes.
–¿Por qué?
–¡Porque sólo me gano el mínimo!

24.  ¡Mañana se casa!
Un señor entra en una tienda y le dice al empleado:
–Vengo a pagar el último plazo del cochecito del niño.
–¿Y qué tal esta el niño?
–¡Perfectamente, mañana se casa!

25.  Mis memorias
Un escritor le dice a un amigo: –He empezado a escribir
mis memorias.
–¡Maravilloso! Ojalá me llames cuando llegues a mayo de 1996 y recuerdes que te presté $5.000.

26.  ¡Ah, cubanos!
Un cubano está viendo televisión y aparece la cara de Castro; cambia el canal y vuelve a aparecer la cara de Castro; cambia y cambia de canal y sigue apareciendo Castro; cambia una vez más y aparece un agente de la policía, señalando con un dedo, y le dice:
–Si vuelve a cambiar de canal, son cinco años en la cárcel.

27.  El abuelo
Un amigo le enseña el retrato de su abuelo a otro amigo y le dice:
–Este es el retrato de mi pobre abuelo.
–¿Murió?
–No, pero es ¡pobre!

28.  La compañía
La amante del político le recrimina a éste:  
–Me habías dicho que te separarías de tu esposa.
–A ver, ¿en qué campaña electoral dije eso?

29.  Los huevos
Una señora entra a un bus, se sienta y pone una cajita en la otra silla, llega un señor y cuando se va a sentar ella grita:
–Señor, cuidado con los huevos.
–Perdone señora, ¿en la caja lleva huevos?
–No, señor, alfileres.

30.  Un señor llega
a un hospital
mal herido,
y la enfermera
le pregunta:
–¿Señor, usted es casado?
–Sí,  señorita, pero esta vez fue un bus el que me atropelló.