Las empresas colombianas de varios sectores han buscado reducir su huella ambiental a través del desarrollo de plantas de producción amigables con el planeta.
Implementar sistemas de energía alternativa, promover los procesos limpios, tener un tratamiento de aguas y basuras, manejar los residuos sólidos y reciclar, son algunas de las estrategias que las organizaciones han puesto en práctica, según William Michaels, presidente de la Fundación Cultural y Ecológica de Colombia.
Precisamente, una de las compañías que se ha destacado en este aspecto es Celsia y su filial Epsa, que en 2015 destinaron más de $24.651 millones en Colombia y US$580.433 ($1.677 millones) en Centroamérica en proyectos ambientales.
Su inversión dio frutos, pues lograron ahorrar 1,1 millones de kilowatts por hora en las operaciones de centrales hidroeléctricas. Asimismo, 82,5% de los residuos fue aprovechado en reciclaje y generación energética, y se redujeron 17,8% los desechos peligrosos con respecto a 2014.
Otra de las empresas que se ha destacado por las bondades con el medio ambiente es Procter & Gamble (P&G), que a parte de desarrollar sustancias que limpian el agua y ofrecer detergentes libres de fosfatos, han optimizado sus procesos en las plantas y oficinas.
La multinacional tiene un programa llamado Basura Cero, con el que se busca que “los desechos que generamos sean solo 0,5% del total, y el resto sea reutilizable y reciclable”, según indicó Gustavo Castellanos, country manager de la compañía.
Hace cinco meses, cuando comenzó este plan, las oficinas de la empresa generaban 32% de desechos que iban a parar a rellenos sanitarios. Hoy se ha logrado llegar a una generación de 6% de basura, una cifra que esperan disminuir cada vez más.
De igual forma, con la planta de P&G en Medellín se quieren preservar mejor los recursos hídricos y aprovechar los desechos, por lo que se han fijado la meta de que a 2018 no se produzcan residuos, según explicó Castellanos.
Por su parte, SABMiller a través de Bavaria ha conseguido mejorar sus procesos en las plantas, por eso han trabajado en tres ejes: disminuir el consumo de agua, enfocarse en el tratamiento de residuos y optimizar la energía.
Según Jorge Bedoya, director de la Fundación Bavaria, en conjunto, sus plantas han logrado aprovechar, reutilizar y comercializar 96% de los residuos que se generan en las plantas. De igual forma, 14% del agua que se utiliza para limpiar o en servicios es reciclada, 85% de la energía se obtiene mediante gas natural o combustibles limpios que generan bajas emisiones, de las 7.000 botellas que manejan, 98% es reutilizable.
En la misma vía, la corporación ha logrado gastar menos agua en la producción de cerveza. “En 2011 se usaban cuatro hectolitros de agua por hectolitro de cerveza producido, pero en 2015, en promedio las plantas utilizaban solo tres. Eso significa que somos mucho más eficientes en el uso de agua para producir un litro de cerveza”, indicó Bedoya.
Otras plantas ecoamigables
La planta de Bugalagrande en Valle del Cauca de Nestlé tiene varios procesos a destacar, uno de ellos es Cisco, un programa con el cual se instaló tecnología para aprovechar los residuos sólidos y líquidos del café, con el fin de transformarlos en energía. En la planta también se ha buscado eliminar los residuos sólidos que llegan al relleno sanitario.
En esta misma línea, Unilever ha conseguido disminuir 39% de las emisiones de CO2 de energía, bajar 35 % el uso de agua y reducir 97% del desperdicio total.
Holcim también ha dado grandes pasos en este aspecto. La empresa, a parte de ahorrar agua y reutilizar la que gasta en el proceso de refrigeración, ha conseguido bajar los niveles de ruido gracias a las tecnologías aplicadas en la molienda.
Sobre esto, el experto en empresas Ricardo Mejía Cano, mencionó que “los empresarios se están dando cuenta que si no son responsables con el medio ambiente y la sociedad pueden sufrir enormes perdidas en su reputación”.
A parte de la buena imagen que proyectan las compañías, influye el hecho del ahorro que se genera al usar fuentes de energía alternativa, pues frente a otros países, el empresariado colombiano paga mucho por este recurso.
A las Pyme les falta en sostenibilidad
El tema de sostenibilidad está más atrasado en las Pyme, según Jaime Moncada, director del Capital Natural del Consejo Empresarial Colombiano para el Desarrollo Sostenible (Cecodes). La principal limitación de este tipo de empresas es la inversión, en especial, porque no tienen la capacidad de contar con personal encargado del área de responsabilidad social. Asimismo, se mantienen ocupados con el día a día y se les dificulta aplicar estrategias. El experto comentó que hay firmas de sectores como el financiero, que así no dependan de los recursos naturales, están enfocadas en ese proyecto.
Las opiniones
Gustavo Castellanos
Country manager de P&G
“En la planta que tenemos en Medellín nos hemos fijado que para 2018 se generen cerca de cero desechos en los rellenos sanitarios”.
Ricardo Mejía Cano
Especialista en empresas
“El empresariado colombiano se está dando cuenta de que tiene que trabajar en responsabilidad social y sostenibilidad”.
Jorge Bedoya
Director de la Fundación Bavaria
“La planta de Tibazoza está entre las tres primeras a nivel mundial del Grupo SABMiller por el uso eficiente del recurso hídrico”.
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Editor de esta nota:
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Fuente: http://www.larepublica.co/