La multinacional Kellogg’s tiene un plan de inversión a cinco años que contempla la renovación de su planta en Bogotá, con el objetivo de producir nuevas líneas de granola. Desde esta fábrica, se abastece 95% de la región andina. Cerca de 30% de lo que se produce se exporta a Perú, Ecuador, Venezuela y Bolivia, mientras que 70% se queda en el mercado local. Según Javier Letamendía, vicepresidente y director de Kellogg’s para el Norte de Latinoamérica, la línea de granolas fue lanzada hace un año y tuvo un gran impacto, debido a que aumenta la tendencia por consumir estos productos.

No solo las granolas son el foco de este proyecto, pues la compañía busca renovar sus instalaciones con el objetivo de garantizar que se cumplan estándares de calidad y que se pueda reducir la huella de carbono y el impacto ambiental.

Entre otras novedades, la empresa lanzará otra línea de Corn Flakes, su icónica marca y herencia del creador. Esta sería la primera de varias innovaciones del próximo año, pues en junio estarán disponibles las granolas.

De otro lado, Letamendía aseguró que le están apostando a Pringles, una marca que adquirieron en 2012, cuando se la compraron a Procter & Gamble por US$2.350 millones, y que ha tenido una gran acogida en Latinoamérica.

“Las cifras tienen un crecimiento continúo de alrededor de 20% por año. Estamos aprendiendo porque en Latinoamérica nos habíamos enfocado en cereales”, comentó el directivo, quien aclaró que, a diferencia de otros productos, estos son importados desde Estados Unidos y México.

En efecto, los cereales han sido el punto fuerte, al punto en que lideran el segmento con sus marcas Choco Krispis y Zucaritas. De hecho, en toda la región 95% de la producción es en cereales.

Apuesta por la nutrición

La compañía de alimentos y el Banco de Alimentos han donado dos millones de desayunos a niños de bajos recursos. Este año 3.500 niños recibieron el primer plato del día, todos los días del año, gracias a esta alianza.

Este compromiso con la población vulnerable es parte del legado que dejó Will Keith Kellogg, el fundador de la corporación, quien decidió que 20% del capital fuera a la Fundación Kellogg, según explicó Letamendía.

En esa línea también inauguraron el Instituto de Nutrición y Salud Kellogg’s en Colombia, que ha desembolsado $225 millones para financiar proyectos de estas áreas que se ejecutan en el país. Hace unos meses decidieron financiar dos investigaciones de la Clínica de Maternidad Rafael Calvo y la Universidad de Antioquia.

Fuente: http://www.larepublica.co