El avistamiento de aves es el producto estrella. También los destinos de naturaleza y mucho más. “Colombia es el país de moda. Somos el país de las buenas noticias, el país de la paz y del realismo mágico”, dice Felipe Jaramillo, presidente de ProColombia, quien se declara emocionado ante el buen momento por el que pasa el turismo colombiano. Y para aprovechar que Colombia brilla en el panorama turístico mundial, la cartera a su cargo está promoviendo diversos proyectos con los que busca atraer más visitantes internacionales. Avistamiento de aves, productos y servicios para la comunidad gay y naturaleza y aventura hacen parte de la estrategia.
“En tiempos de paz, el turismo es el gran motor de desarrollo económico. Tenemos una Colombia más grande para mostrarles a los viajeros internacionales por qué contamos con más regiones que abren sus puertas”, expresó Jaramillo al destacar que ese mensaje es el que se le está dando al mundo.
Se calcula que durante la etapa del posconflicto (comprendida en un plazo de diez años) el turismo internacional crecerá un 30 por ciento.
“Nuestra estrategia para promover el turismo internacional busca materializar los réditos de la paz y presentar ante el mundo la oferta en naturaleza y turismo de aventura que ofrecen regiones inexploradas como Caquetá, Putumayo, Casanare, Vichada, Guaviare y Guainía”, añadió Jaramillo.
María Claudia Lacouture, ministra de Comercio, Industria y Turismo, destacó que otras de las apuestas para atraer turistas internacionales de alto poder adquisitivo son la hotelería de lujo, los servicios calificados de turismo de salud y bienestar a través de clínicas y profesionales especializados. También los campos de golf y los eventos enfocados en este deporte, así como el turismo corporativo, convenciones y negocios.
Estas son las apuestas con las que Colombia busca que el turismo internacional siga creciendo, como lo ha hecho en los últimos años, con un impresionante incremento del 70 por ciento entre el 2010 y el 2015.
Destinos sostenibles
En línea con la Organización Mundial del Turismo (OMT), que declaró el 2017 como el año del turismo sostenible, Colombia promueve un turismo respetuoso con la naturaleza. Sobre todo en los 59 Parques Nacionales Naturales que ostenta el país en todas sus regiones.
“Debemos gestionar los destinos naturales de manera responsable para que el turismo no se convierta en una trampa y toda esa sostenibilidad ganada se pierda con la llegada masiva de turistas”, afirmó Josefina Klinger, presidenta de la organización Mano Cambiada, que administra los servicios turísticos del Parque Nacional Natural Utría, en Nuquí (Chocó).
La líder del turismo comunitario es enfática al aclarar que “no nos interesa un turismo masivo y depredador de nuestra conservada biodiversidad”. Lo mismo consideran empresarios del sector como Samy Bessudo, presidente de Aviatur, quien se imagina a Colombia con un modelo turístico como el de Costa Rica, que con su eslogan Pura Vida ha logrado posicionarse como potencia internacional de turismo de naturaleza, donde la conservación es el eje principal.
A vuelo de pájaro
Con más de 1.900 especies identificadas, 79 de ellas endémicas, el territorio colombiano alberga el 20 por ciento de todas las variedades que existen en el mundo y se ubica como el más biodiverso del planeta.
Cada turista que viaja para observar aves gasta entre 2.500 y 3.000 dólares por visita y se calcula, de acuerdo con un estudio realizado por Conservation Strategy Fund y Audubon National Society, que la demanda para Colombia en este segmento será de cerca de 278.850 observadores cada año.
Y la gran ventaja es que a casi todas las regiones del país se puede ir a avistar aves. Risaralda, la Sierra Nevada de Santa Marta, el norte del Tolima, Quindío y Valle del Cauca son varios de los destinos que ofrecen recorridos de avistamiento de aves.
Turismo para la comunidad gay
En la reciente edición de Fitur, en Madrid, Colombia ganó el premio como mejor destino emergente gay del mundo, entregado por la firma española Diversity Consulting International, reconocida por promover destinos turísticos amigables con la comunidad Lgbti (lesbianas, gays, bisexuales, transexuales e intersexuales).
“Son cada vez más los miembros de esta comunidad, de todo el mundo, los que llegan a conocer las maravillas de nuestro país”, expresó Jaime García, gerente de la marca Gay Travel Colombia, que hace parte de la agencia de viajes Aviatur. Recorridos en moto desde Bogotá hasta el desierto de La Tatacoa, en el Huila, y visitas a La Guajira en jeep, además de planes en varios de los principales spas del país, hacen parte de la oferta para estos viajeros, que al año mueven, en el mundo, 185.000 millones de dólares y que representan el 20 por ciento de los turistas a nivel global.
Hace poco fue inaugurado el portal colombiano Diboo.travel, que cuenta con un portafolio de setenta hoteles del país especializados en atender a la población Lgbti.
JOSÉ ALBERTO MOJICA PATIÑO
Subeditor de Vida
Fuente: http://www.eltiempo.com/