Con su propósito de contribuir al desarrollo del país y de la región mediante la inversión social, la Fundación Sura lleva 45 años canalizando los aportes de las compañías del grupo empresarial Sura hacia las poblaciones más vulnerables. El año pasado invirtió un total de $16.786 millones en este tipo de iniciativas. LR habló sobre el aterrizaje de la fundación en Chile y México este 2017 con Fernando Ojalvo, vicepresidente de asuntos corporativos y secretario general del conglomerado antioqueño, quien se retirará el próximo mes tras 29 años de labores.
¿A cuánto ascendieron sus inversiones en 2016 y en qué proyectos se centraron?
El año pasado la fundación invirtió una suma de $16.786 millones (unos US$5,6 millones) en iniciativas que apuntan a la calidad de la educación, la promoción cultural, el fortalecimiento institucional y el voluntariado corporativo, entre otros proyectos. En 2016, recibimos $5.000 millones del Grupo Sura y $9.900 millones por parte de Suramericana y Sura Asset Management.
¿Qué impacto ha tenido la fundación en los últimos 10 años de labores?
Hemos invertido cerca de $110.000 millones (unos US$27 millones) en alianza con cerca de 600 organizaciones.
¿Dónde tienen presencia?
Hemos logrado llegar a 25 departamentos. Los de mayor volumen de inversión son ciudades como Medellín, Bogotá, Cali o Buenaventura. Pero también tenemos presencia en otras ciudades como San Andrés y Providencia.
¿Cuántas personas se han beneficiado con este tipo de programas en el último año?
En 2016, se aprovecharon de nuestras iniciativas en Colombia cerca de 120.000 personas a través de 81.350 niños y niñas, 15.000 familias y 2.800 educadores de 200, gracias a programas como el de Félix y Susana.
¿En qué consiste ese programa?
Es un proyecto de educación en combinación con el Ministerio de Educación que fortalece las relaciones entre los niños, la familia y la escuela mediante el desarrollo de capacidades en los educadores para potenciar el afecto y la comunicación como facilitadores del proceso de formación. Este modelo se ha extendido a nuestras sedes de El Salvador y de República Dominicana.
Además de estos dos países también tienen presencia en Panamá, ¿esperan llegar a más lugares de la región este año?
En la actualidad, estamos presentes en El Salvador, Panamá y República Dominicana y, en medio de nuestro compromiso de continuar internacionalizando el desarrollo social, este año acabamos de formalizar la creación de la fundación en Chile y también estaremos llegando a México.
¿Tienen algún tipo de programa social especial para la época del posconflicto?
Estamos trabajando en mirar los programas que hoy desarrollamos. Además de la iniciativa de Félix y Susana, tenemos un proyecto denominado Soluciones en el que estamos invitando a varias empresas del país con el objetivo de buscar mecanismos para las personas que se reinsertan a la sociedad civil. Aunque ya lleva 10 años, queremos darle mayor proyección social en esta coyuntura.
¿Cuánto dinero destinaron al rubro de la promoción cultural en 2016?
Tuvimos una inversión de $2.795 millones en iniciativas culturales. Destaca el programa Memoria y Creatividad que acompañó a cerca de 200 artesanos en nueve departamentos, para la creación, el desarrollo y fortalecimiento socio-empresarial.
Recientemente, anunció que se retiraba de Sura, ¿qué aspectos destacaría de su labor en estos años?
Llevo casi 30 años en esta compañía y desde hace 25 años colaboro con la fundación. Destacaría no solo la parte legal, sino también los estudios que dieron origen a la compañía y que hacen parte de la actividad social. He tenido la suerte de tener mucha presencia en los proyectos de responsabilidad social de Sura, una compañía que destaca por su liderazgo y su preocupación por el entorno.
La opinión
Álvaro Urquijo
Experto en responsabilidad social empresarial
“En este proceso de transformación del país es muy importante que los grandes grupos empresariales inviertan en proyectos sociales para poder generar una capacidad local”.
Fuente: http://www.larepublica.co