La multinacional anglo-holandesa Unilever cerró uno de los mayores negocios en lo corrido del 2017, tras la compra de las marcas Aromatel, Savital, eGo, Fortident y BioExpert a la compañía colombiana Quala. Solo ese portafolio de cinco productos le representó a Quala una facturación de US$400 millones durante el año 2016, la cual ahora pasará a manos de Unilever.
Quala tiene presencia en países como Colombia, México, Centroamérica, República Dominicana, Ecuador y Perú y se desprendió de esas marcas representativas para enfocarse más en las líneas de alimentos y snacks, entre otros.
El presidente de Unilever para América Latina, Miguel Kozuszok, dijo desde Buenos Aires a El País que dicha negociación permitirá fortalecer más las operaciones de la compañía en la región y en otros 190 mercados.
La firma cuenta con una planta operativa en las afueras de Palmira, donde posee además un complejo para la fabricación de detergentes inaugurado en el 2014.
¿Qué viene luego de la adquisición de las marcas a Quala?
Lo primero que viene es la aprobación por parte de todos los entes reguladores. Este proceso debe pasar necesariamente por las oficinas regulatorias en los países donde operamos. Eso nos llevará entre seis y nueve meses aproximadamente. Después de eso viene mucho trabajo en cuanto a la integración de estas marcas y su incorporación a nuestras líneas de negocios, y manejar por supuesto un nuevo portafolio como este.
Esta adquisición nos ha generado un sentimiento de entusiasmo porque se adquirieron marcas que son admiradas en el mercado por parte de los consumidores.
¿Vendrán más adquisiciones de marcas por parte de Unilever?
No hay unos planes detallados sobre lo que vendrá. Pero si basta decir lo que pasó con las adquisiciones que ha hecho Unilever a lo largo de su historia, y es que normalmente queremos darle mayor proyección a una marca desde el lugar donde la tomamos y hacerla más grande y que vaya más lejos y en segmentos nuevos de mercado. Es la posibilidad de estar más cerca de los consumidores.
Pero, ¿qué motivó o inclinó a la empresa a comprar esas cinco marcas de Quala?
La principal razón es que estaban a la venta y que la empresa (Quala) quería desprenderse de estas marcas, cosa que no es tan habitual.
Obviamente, nosotros siempre estamos mirando el mercado para buscar la forma de complementar nuestro portafolio de productos con marcas interesantes.
Somos admiradores de lo que la marca (Quala) había logrado, y que ante todo que fueron capaces de posicionarse en un segmento donde no estábamos operando y que consideramos de gran valor.
Cerrado este negocio, ¿qué nueva estrategia hará Unilever para reforzar su posición en el mercado latinoamericano?
Lo que adquirimos son alrededor de US$400 millones en facturación anual con estas marcas. Esto tiene un impacto muy significativo en Latinoamérica donde está presente la marca, ya que en estos lugares el consumidor encontrará los mismos productos los cuales estaban acostumbrados a comprar.
Durante dos años estos productos seguirán siendo fabricados por Quala a través de maquilas en sus mismas factorías. Eso se hará en Colombia y México.
Pasado ese lapso, Unilever —que adquirió algunos de los activos utilizados para su fabricación— los incorporará luego a las líneas habituales de producción de la compañía.
Y estudiaremos la forma de añadirle valor a este nuevo portafolio que estamos adquiriendo.
En este momento, ¿cómo observa la competencia en el segmento de los productos de aseo, para el cabello y otros, donde hay grandes jugadores como Colgate Palmolive y Procter & Gamble?
El hecho de que el mercado esté más competido eso se traduce en mayores beneficios para los consumidores. Es una competencia que respetamos y alentamos.
Eso hace que debamos esforzarnos más para ofrecer ese diferencial en productos que busca la gente.
Por ahora, los cambios no van a ser tan dramáticos ya que el mercado seguirá siendo muy competido, y ahora lo que se hará es colocar este nuevo portafolio entre los consumidores como un complemento de las marcas que tiene Unilever.
Es una riqueza adicional que recibirá el mercado.
¿Hay proyecciones en ventas con esta nueva facturación?
No hacemos públicas estas proyecciones. Lo que vamos a intentar es crecer más que el mercado.
Hoy existe una desaceleración económica en Colombia y en gran parte de América Latina. ¿Cómo enfrentar esa coyuntura, teniendo en cuenta que muchos hogares han reducido sus consumos?
Lo que se debe pensar es que cuando la economía sufre también surgen problemas en el poder adquisitivo de la gente y el empleo.
Unilever busca estar en estas coyunturas más cerca del consumidor, brindando productos a su alcance dentro de esos presupuestos restringidos. Es el gran desafío que tenemos. Y vemos a Latinoamérica como una región donde hay diferentes comportamientos por niveles socioeconómicos y donde cada uno tiene una necesidad diferente con consumidores de todo tipo. Eso representa un reto, si a eso le sumamos la volatilidad de los mercados.
En otras palabras, seguir la estrategia de fabricar productos en empaques pequeños y económicos para llegar a los consumidores de menores ingresos...
Por supuesto. Cada potencial consumidor tiene el derecho de acceder a productos que le mejoren su calidad de vida en estas y otras presentaciones. Pero este es un compromiso global para llegar a todos los niveles de la población, protegiendo de paso el medio ambiente y las comunidades, lo cual está incluido en nuestro Plan de Vida Sustentable. Las marcas nuestras tienen ese propósito y por eso crecen a mayor velocidad que otras.
Las nuevas marcas adquiridas a Quala serán incorporadas a este programa. Entre ellas, por ejemplo, Savital que está basada en un ingrediente natural para el cabello como el Aloe Vera.
¿Hasta dónde proyecta Unilever hacer expansiones en Colombia, con estas nuevas marcas, y sobre todo por la existencia de una planta en Palmira, Valle?
La verdad es que tenemos muchas esperanzas en Colombia. Es un mercado donde hay mucho espacio para seguir creciendo. Nosotros hemos siendo favorecidos por haber desarrollado en Palmira una planta nueva para detergentes después de adquirir algunas marcas a Colgate como FAB. Eso nos motivó a invertir en esa planta.
Estamos interesados en desarrollar nuevos negocios en Colombia, y un ejemplo claro de ello, fue la compra de las cinco marcas de Quala.
Y en algún momento eso implicará hacer nuevas inversiones para fabricar en nuestras plantas los productos y marcas que adquirimos. Hay una gran esperanza de que las inversiones van a seguir llegando a Colombia.
Fuente: http://www.elpais.com.co