Muchos de los alimentos caseros, veganos o proteicos son, en realidad, productos procesados y ultraprocesados que no aportan ningún valor nutricional extra. Basta con darse un paseo por el supermercado para darse cuenta de que la mayor parte de los productos procesados y ultraprocesados que crea la industria alimentaria están destinados a un público en concreto. Se nos van los ojos detrás de productos de elaboración casera, y esto no es más que una declaración nutricional que no aporta ningún valor extra al producto.