La consultora Deloitte detalló seis principios fundamentales que las empresas deben adquirir para potenciar sus marcas. Hoy en día, las empresas buscan que sus marcas sean fuertes: que innoven, mejoren vidas y generen lealtad. Ante esta situación, la consultora Deloitte analizó a más de 150 firmas de las que mejor entienden cómo crear diferenciación emocional y crecimiento financiero.
En primera instancia, para determinar por qué alcanzan el éxito, se detectaron cuatro tipos de organizaciones, en base a las estrategias que llevan a cabo:
Y-Prophets: Poseen un propósito bien marcado y actúan en base a él.
Free Radicals: Rompen las reglas y tienen una mentalidad “sin límites”.
Tiny Titans: Construyen el éxito manteniendo un pequeño negocio a pesar de obtener grandes ingresos.
Re-starts: Marcas establecidas que encuentran formas innovadoras de mantenerse relevantes y de adaptarse al siglo 21.
Asimismo, Deloitte publicó una serie de lineamientos a seguir que permiten que una marca sea impact brand: que impacte en la sociedad y logre un crecimiento a través de eso.
1- Tratar la transparencia como un imperativo cultural
Anteriormente, el manejo de una marca estaba enfocado en la reputación externa de la compañía, tratando de proyectar una imagen que resultaba inconsistente con la realidad. Actualmente, existen organizaciones que han entendido que la cultura corporativa debe ayudar a la promoción de los recursos humanos, un área que pasa a tener una función crítica.
2- Cada marca es un agente de cambio social
Muchas impact brands entienden que para construir lealtad, deben incluir un cambio social en su modelo de negocios. Para ellas, lo que hacen es más importante que lo que dicen.
3- Humanizar la revolución digital
Las entidades que logran un impacto considerable, comúnmente, utilizan tecnología a través de diversas plataformas digitales. En momentos en que estos avances son omnipresentes, las impact brands demuestran que la empatía es a menudo la distinción más poderosa de todas.
4- Mantener el carácter de un estudiante
La humildad permite que las marcas mejoren continuamente y que estén comprometidas a empujar sus propios límites, desafiando su propio statu quo y adaptándose a las necesidades cambiantes de la sociedad.
5- Crear una credibilidad corporativa personal
Antes, ser una empresa grande era sinónimo de confianza. Ahora, eso no es necesario porque muchas entidades entienden que los consumidores prefieren a los humanos antes que a las corporaciones. Por eso, buscan una conexión personalizada.
6- Tener una mentalidad flexible
Las impact brands encontraron nuevas ventajas en el mercado cambiando permanentemente las reglas de su negocio. Esta agilidad puede derivar de una cultura que recompense la experimentación y el pensamiento no convencional. Para adquirir este comportamiento, muchas marcas desmantelan las jerarquías empresariales tradicionales para mejorar la toma de decisiones. Los millennials tienen más probabilidades de reportar altos niveles de satisfacción al trabajar bajo un modelo creativo e inclusivo.