La penetración de estos dispositivos en países desarrollados sobrepasará el 90 por ciento. El uso de teléfonos inteligentes crecerá en los próximos cinco años en todo el mundo. Según un informe realizado por la firma Deloitte, para finales del 2023 la penetración de estos dispositivos en países desarrollados sobrepasará el 90 por ciento, un incremento del 5 por ciento con respecto al 2018.
De hecho, se estima que la venta de smartphones será de 1.850 millones por año en 2023, un incremento del 19 por ciento con respecto a 2018 y equivalente a más de cinco millones de unidades por día.
Para Nelson Valero, socio líder de tecnología en Deloitte Colombia, esa irrupción se dará porque los smartphones permitirán suplir la mayoría de actividades en entretenimiento y productividad.
“En las empresas, por ejemplo, la asignación de tareas, control de tiempos y la comunicación se realizarán solo con teléfonos inteligentes. Estos aparatos permitirán incluso realizar actividades que se hacen con el computador. Sin embargo, en las decisiones estratégicas se seguirán necesitando los canales tradicionales”, dijo Valero.
De acuerdo con la investigación (es la octava edición), los propietarios interactuarán con sus celulares un promedio de 65 veces al día en el 2023, un incremento del 20 por ciento con respecto al 2018.
Esta tendencia propiciará que la industria cumpla un rol determinante en la economía mundial, debido a que alrededor de 180 millones de unidades se venderán al consumidor en 1.000 dólares o más.
“Esta categoría generará más de 200.000 millones de dólares en ingresos y, en términos unitarios y monetarios, representará mucho más que todo el mercado de tabletas”, reza el reporte.
Pero este fenómeno también plantea preocupaciones. El estudio dice que el 45 por ciento de los adultos siente que usa su celular en exceso. Y otro 45 por ciento alegó que tratará de buscar mecanismos para controlar el uso.
“Este planteamiento tampoco es ajeno en los jóvenes, ya que el 65 por ciento de los encuestados reconocieron usar en exceso su dispositivo. En ese sentido vemos que se está generando una conciencia colectiva acerca de las repercusiones que pueden generan los celulares en la vida cotidiana”, aseguró el ejecutivo.
Cómo respaldar el uso
La investigación encontró que los mecanismos más usados para disminuir el uso de sus smartphones son: guardar el teléfono en un compartimiento cuando comparte en familia o con amigos (38 por ciento), desactivar el audio de notificaciones (30 por ciento), apagar el celular durante la noche (26 por ciento), activar las funciones de no molestar o modo avión (23 por ciento) y apagar la conectividad de datos (21 por ciento).
De otro lado, el reporte señala que las transmisiones y los eventos en vivo generarán más de 545 mil millones de dólares en ingresos directos en 2018. “A pesar de la capacidad de los consumidores de ver contenido por demanda o de atender eventos de forma remota, el consumo en vivo es próspero”, asegura el escrito.
Indicando un creciente deseo de los consumidores de pagar por contenido digital, se espera que para finales de 2018, el 50 por ciento de los adultos de países en desarrollo tengan al menos dos suscripciones a medios exclusivamente en línea, y que para finales de 2020 el promedio se haya duplicado.
Las suscripciones digitales se repartirán de las siguiente manera: videos por demanda (375 millones de suscripciones), música (150 millones), juegos (35 millones) y noticias (20 millones).
El estudio pronostica que entre 2018 y 2019, ver televisión tradicional es una actividad que disminuirá de 5 a 15 por ciento entre las personas de 18-24 años en Estados Unidos, Canadá y el Reino Unido. En 2017, según el reporte, el consumo de TV tradicional fue 124 minutos al día, mientras que el consumo de video móvil fue de 156 minutos cada día.
Fuente: http://www.eltiempo.com/