Por: Elizabeth Melo, Presidente Ejecutiva ANDA
Desde las primeras ideas para este artículo, escritas en Google Keep Mobile, hasta este momento en el cual el lector recibe este contenido y lo disfruta (con seguridad en su teléfono celular con una distribución de un poco más del 20% IOS, un poco menos de 80% Android en nuestro país), es un hecho que la mayoría de nuestras actividades profesionales, académicas y personales en este momento y hacia el futuro serán mediadas por dispositivos inteligentes.
El celular, el Pad, smartwatch y monitores cardíacos, televisores, asistentes digitales y hasta smart homes, dejando por fuera una extensa lista de dispositivos con acceso a internet y datos personales sensibles que actualmente superan a los seres humanos en una proporción de 3 a 1, hacen parte de nuestras vidas, facilitando muchas actividades cotidianas y, siendo sinceros, haciendo un poco más difíciles otras.
Sin aludir a aquellas personas que prefieren la experiencia del papel y el lápiz; el libro impreso; comprar su ropa en una boutique; o salir con la familia al supermercado, los dispositivos inteligentes ofrecen diversas ventajas al momento de optimizar el tiempo, un bien bastante escaso; y muchas veces a través de ofertas, promociones o precios más cómodos por las propias características del canal de distribución, optimizan también el dinero, otro bien escaso.
Los nuevos medios y canales ofrecen enormes posibilidades a los anunciantes, corporativos y particulares. Desafortunadamente en este proceso de apertura, también crean espacios para los errores, el aprovechamiento de un ecosistema no regulado y, en los escenarios más graves, el fraude y vulneración de los derechos de los consumidores por parte de aquellos actores del mercado que trabajan al margen de la legalidad. Las marcas, como consumidores en este mundo globalizado, son víctimas también de estas prácticas.
El tema del Día mundial de los derechos del consumidor 2019 son los dispositivos inteligentes, y la confianza necesaria que el consumidor debe poder depositar en los productos y servicios a los que accede a través de ellos. En línea con esto, y nuestra misión gremial orientada a la promoción de las mejores prácticas en comunicaciones comerciales, el internet de las cosas y sus posibilidades estratégicas para las marcas es fundamental; así como acompañar su desarrollo en nuestro país, desde ahora cuando es un tema incipiente.
Tanto desde los comités técnicos de la asociación, espacios diseñados para la interacción y el aprendizaje colaborativo entre nuestros afiliados; así como desde la nueva Comisión Nacional para la Autorregulación de la Comunicación Comercial, abordaremos los temas relacionados con este importante match tecnología-mercado, buscando generar guías de mejores prácticas y compromisos puntuales para preservar otro bien incluso más escaso que los dos anteriormente mencionados: la confianza.
Hoy en el día mundial de los derechos del consumidor, quiero hacer una invitación especial y extensa a todos aquellos que, como los afiliados ANDA “Construyen país”, a que redoblemos y articulemos los esfuerzos alrededor de la protección del consumidor, sin distinción del medio, análogo o digital; on-line u off-line; atendiendo antes que nada a la legalidad, la ética y el autocontrol.