Por Elizabeth Melo,
Presidente Ejecutiva de la Asociación Nacional de Anunciantes
El expresidente Betancur deja un vacío en el espíritu intelectual del país. Como uno de los grandes aliados de la cultura nacional, dejó imágenes imborrables en la memoria de los colombianos: celebró como nadie el Nobel de Literatura junto a Gabriel García Márquez, homenajeó a Rafael Escalona y Leandro Díaz como juglares, reconociendo su legado musical, su hogar no fue menos que una galería de arte y sus poesías aún resuenan en las calles de su natal Amagá en Antioquia. Su carácter noble, pero firme, fue ejemplo para los colombianos a quienes lideró durante tres de las más grandes tragedias que ha enfrentado la nación: la toma del Palacio de Justicia, el terremoto de Popayán y el desastre de Armero.
A Betancur se le conoció como el mecenas de la cultura, como el último de los presidentes humanistas de Colombia, un hombre de paz y un amante de las letras. Quizá su mayor legado fue precisamente ese, su trabajo incansable por el desarrollo cultural del país. Junto a su esposa, Dalita, se encargó de impulsar la carrera de cientos de artistas nacionales, -pintores, poetas, músicos, escultores, creativos- en pocas palabras, se dedicó a ser un gestor cultural.
Precisamente, el mismo presidente Iván Duque lo destacó como una de las primeras personas en entender el concepto de Economía Naranja. Incluso desde su periodo presidencial, Betancur ya consideraba que las industrias creativas podían impulsar el desarrollo nacional; más allá de gobernar, Belisario se preocupó por impulsar espacios educativos-culturales como el Museo de los Niños y la Casa de Poesía Silva.
Para la Asociación Nacional de Anunciantes fue un honor poder haber apoyado el evento en el que probablemente hizo su última participación en público, la XXIV Plenaria del Círculo de Montevideo. El Círculo nació en 1996 con el fin de reunir a un destacado grupo de actores relevantes de la sociedad, intelectuales y políticos, para discutir sobre las principales problemáticas de la humanidad y lanzar ideas para resolverlas. Betancur hizo parte de los 21 miembros de la Fundación, junto a figuras destacadas de la región como el expresidente uruguayo y fundador del Círculo, Julio María Sanguinetti, el empresario mexicano Carlos Slim, entre otros.
Durante su participación en el panel inaugural de la reunión, su par uruguayo José María Sanguinetti lo presentó como “el exponente máximo del castellano hablado”. Posiblemente, no hay otra manera de describir a un hombre que dedicó su vida a trabajar en pro de la cultura y del impulso a las actividades creativas, que fue artista, poeta y un aprendiz eterno.
Gracias a ese camino que edificó, hoy comprendemos la importancia de promover un sector, en el que se encuentra la comunicación comercial que la ANDA apoya, basado en el talento y las ideas. Precisamente, fue sobre estos temas que el expresidente estuvo reflexionando en la más reciente plenaria del Círculo de Montevideo, donde nos honró con su presencia y nos regaló el placer de escucharlo.
Aquí compartimos el panel de su intervención para que puedan recordarlo y deleitarse con su gran intelecto y elocuencia. Gracias.